¡Cierra la boca!

Título: ¡Cierra la boca!

 Autor: Miguel Ángel Mendo

 Editorial: Alfaguara Infantil

 Personajes principales: Marta (es una niña que todo lo que dice, se hace realidad); Aida (una compañera de clase); Rafa (el primo de Marta); Sergio (hermano de Marta).

 Resumen: Marta es una niña que se expresa muy mal. Por eso su profesora de lengua le pide que memorice todas las palabras que empiecen por “AB”, pero no consigue aprendérselas. Marta se enfada con el diccionario y comienza a insultarlo con palabras que empiezan por “AB”. Entonces el diccionario empieza a encogerse, y como se queda muy sorprendida, lo coge con unas pinzas y corre por el pasillo para enseñárselo a su madre. En el pasillo se encuentra el patinete de su hermano Sergio, tropieza, se cae y se traga el diccionario.

A partir de entonces descubre que todo lo que dice se hace realidad, pero después de un rato, desaparece.
Marta se asusta y se inventa un ataque de afonía para dejar de hablar. Y se comunica con un cuaderno y un bolígrafo.
Su primo va de visita y se da cuenta de que le oculta algo. Entonces Marta se inventa que les ha hipnotizado (a él y a su madre). Para demostrárselo, van al centro comercial y Marta dice “relojes de oro”. En ese momento aparecen relojes en la puerta y se forma un gran alboroto.
Marta y su primo se esconden en el baño y logran escapar porque Marta dice “patinetes”.
Llega el lunes, y Marta tiene que ir al cole. Está muy preocupada porque no se había aprendido las palabras y su compañera Aida comienza a burlarse de ella y a decir que no se las sabe.
Por eso se pone a pensar en algo para que suspendan las clases. Entonces dice: “Nieve rosa y calentita”. Y todos se ponen a jugar con la nieve, los niños y los profesores.
Aida comienza a sospechar que algo raro pasa y Marta se lo cuenta todo. Entonces Aida siente pena por ella y decide ayudarla.

 Opinión Personal: me ha parecido muy divertido, por lo que le ocurre a Marta y por cómo lo soluciona.

También me gusta por cómo cambia la conducta de Aida hacia Marta, al ayudarla. Y al final se hacen amigas.

 Por: Marta Vinuesa Martínez